20 céntimos de multa por un delito cometido por su abuelo, ya muerto, hace 100 años

Un hindú deberá afrontar el pago de una multa (el equivalente a unos 20 céntimos de euro) como compensación por una denuncia falsa efectuada por su abuelo Kallu, quien acusó hace cien años a su suegro de mantener relaciones extramatrimoniales con una mujer en el pueblo de Kaili, de acuerdo con la decisión de un consejo local ("panchayat") en la región de Uttar, en el norte de la India.

El abuelo murió de viejo, pero el consejo local -que tiene competencias judiciales- continuó con las vistas hasta llegar la semana pasada a la conclusión de que las alegaciones de Kallu contra su suegro eran falsas.

Tras una larga deliberación de 40 horas, los líderes tribales del pueblo, elegidos normalmente en función de su edad, dictaminaron que el nieto de Kallu, Naushad, debía ser castigado por la ofensa de la falsa acusación de su abuelo.

Naushad, pues, deberá afrontar el pago de 12 rupias, una pena en principio menor que la estudiada inicialmente: sumergir la mano del condenado en una sartén de aceite hirviendo.
(La magistrada del distrito de Meerut, Kamini Ratan Chauhan, ha declarado que la resolución de pequeños casos a nivel local es una "buena señal", aunque dejando claro que nadie está "por encima de la ley".)

Una mujer vive durante 2 años sentada en el váter

Una mujer de 35 años de edad ha estado sentada voluntariamente en el retrete de su novio -el cual le llevaba agua y comida- durante dos años en Ness City (Kansas, Estados Unidos).

Su novio, de 36 años, (no la había atado ni pegado ni la había forzado a quedarse sentada en el retrete) le pedía a diario que saliese del cuarto de baño, pero ella había decidido no volver a levantarse. "Ella decía que no necesitaba ayuda, que estaba bien y no quería irse" ha dicho un novio que, al final, no se sabe muy bien porqué, decidió llamar a la policia, diciéndoles que algo extraño le pasaba a su novia.

Cuando llegaron estos, se encontraron con una mujer totalmente vestida, con su pantalón bajado, sentada sobre el retrete. Sus piernas parecían atrofiadas, y la piel de su trasero había crecido alrededor de la tapa, obligando a la policia a desarmarla y llevar a la mujer -que se negaba a marchar- con la tapa puesta al hospital puesto que iba a necesitar cirugía para poder quitársela donde al final han logrado "extirpársela".

Ahora la policía no sabe si detener al novio por maltrato mientras están a la espera de hacerle un análisis psiquiátrico a la mujer.

Salva al hijo de morir ahogado como salvó al padre hace 20 años

Wang Weiqin, de 58 años de edad y residente en Beicheng (China), es considerado un verdadero héroe local. Y no es para menos después de rescatar a un joven de 17 años de un estanque, 20 años después de haber salvado a su padre de morir ahogado en el mismo lugar.

"Estaba caminando por la orilla cuando mi nieto vio a un chico que trataba de mantenerse a flote", relata. Cuando el abuelo del joven rescatado llegó al lugar quedó totalmente sorprendido al ver que el salvador era el mismo hombre que dos décadas atrás había sacado del mismo lago a su hijo. "No puedo creerlo. No se cómo expresar mi gratitud", asegura el abuelo, Wang Huajian.

Se pasa cuatro meses muerto viendo la tele y conviviendo con su hijo

A. Vilar, un hombre de 94 años ha estado sentado "mirando" la tele cuatro meses muerto, eso y todo pese a convivir con su hijo. Todos los vecinos del barrio que pasaban frente a su casa y lo veían sentado frente a su televisor a través de la ventana, como en tantas otras ocasiones, no sospecharon absolutamente nada en todo este tiempo. Incluso según argumentan algunos de ellos, el cuadro era normal y no notaron olor pese a los meses que llevaba el hombre sin vida.

María, una de las mujeres que vivían al lado del hombre fallecido califica el suceso como "muy extraño" calificando al hijo del muerto como "normal". "El hijo es una persona introvertida pero normal, incapaz de hacer nada", comenta la vecina.

"¿Cómo un cadáver puede llevar tantos días en la misma posición sin que nadie se dé cuenta?", se pregunta Rosa, otra vecina del barrio en el municipio de Sant Hilari Sacalm (Gerona, España). "El hijo paseaba al abuelo cada mañana y yo creo que los vi hace poco, no me lo creo", agrega.

Por avaro, es condenado a comprarle 124.000 rosas rojas a su mujer

Una mujer iraní que denunció a su marido porque, según ella, estaba harta de soportar su tacañería después de diez años de matrimonio, ha conseguido que un tribunal condene a éste a comprarle 124.000 rosas rojas, que cuestan el equivalente a unos 133.000 euros.

"Nos casamos hace diez años, pero muy pronto me di cuenta de que Shahin era un avaro. Cuando vamos a un restaurante, incluso se niega a pagarme el café", explica Hengameh indignada. Por eso, decidió reclamar su dote para castigarle. Pero en forma de 124.000 rosas.

El hombre alegó ante el tribunal que sólo puede comprar cinco flores por día y acusó de encizañar el asunto a las amistades de su esposa. "Sus amigas millonarias son las que le han metido esa idea en la cabeza", dijo Shahin, a quien el tribunal ha requisado un apartamento valorado en 600 millones de riales (unos 42.600 euros) mientras no compre las 124.000 rosas rojas.

Según la ley iraní, una mujer puede reclamar su dote durante el matrimonio y el marido está obligado a entregársela. En los últimos años, muchas iraníes han exigido dotes astronómicas para ese país, de hasta cientos de miles de euros al cambio.