Asesina a una niña y se come sus órganos

Rommel Jandoc, un drogadicto de 29 años, ha asesinado a puñaladas a una niña de 14 años para después descuartizar el cadáver y comerse algunos de sus órganos en el norte de Filipinas, en una población de la provincia de la Unión, 250 kilómetros al norte de la capital, Manila, antes de ser detenido por las fuerzas de seguridad.
Según parece, Jandoc es un conocido perturbado de la zona y se encontraba bajo los efectos de las drogas cuando atacó a la adolescente.

La familia de la niña explicaba a la policía que descubrieron al asesino cuando escucharon gritos y le encontraron comiéndose el corazón y el hígado de la pequeña en un callejón desierto.
Lo más inquietante es que a principios de año, un enajenado sembró el pánico en Cagayan, provincia cercana a la Unión, cuando mató a puñaladas a dos niñas de 4 y 10 años y dejó herida de gravedad a otra menor que intentó violar, antes de ser reducido y luego arrestado.
Anteriormente, en un incidente similar acaecido en junio de 2007, un perturbado acuchilló en la provincia de Samar a casi treinta personas, la mayoría de su misma familia y diez de las cuales murieron.

Parece, pues, que este tipo de suceso está lamentablemente de moda en la región.