22.6.08

El monstruo de Kicevo

Vlado Taneski, un periodista macedonio de 56 años, ha sido detenido como sospechoso del asesinato de tres mujeres de entre 55 y 70 años en 2003 y 2004 en la ciudad de Kicevo, crímenes sobre los que después escribía en los periódicos en los que trabajaba, siendo detenido después de que la policía haya encontrado, mediante el análisis de ADN, su esperma en dos de las víctimas.
Cuando informaba de los asesinatos, visitaba las familias de las fallecidas y hablaba con ellas de lo ocurrido, pero en realidad lo que pretendía era seguir de cerca cómo se desarrollaban las investigaciones. Taneski informaba con regularidad en sus textos de los detalles de los asesinatos, sobre los que ya hubo procesos judiciales y en los que dos personas fueron condenadas a cadena perpetua, pese a que siempre negaron cualquier implicación en los sucesos. No obstante, se sospecha de que probablemente Taneski tenía un cómplice.
El perfil de las víctimas es similar, todas eran mujeres de la limpieza, madres que mantenían a sus hijos solas y que se parecían físicamente a la madre de su "verdugo", con la que tenía muy malas relaciones. El periodista asesino secuestraba a las mujeres, las sometía a brutales maltratos, para violarlas y asfixiarlas finalmente. Tras descuartizar sus cadáveres los introducía en bolsas de plástico y los arrojaba a diferentes basureros ilegales que hay a lo largo de la carretera que lleva de Skopje a Ohrid.